sábado, 4 de julio de 2015

Capítulo 4: ¡Pues aquí empieza la descabellada historia! La excursión maldita [Parte 1]

Al volver de casa de Tiara con Vianna ella me ayudó a instalar los programas que debíamos usar y me enseñó a utilizarlos, era bastante buena, y sin duda era la más amable, pero todas lo eran, no me podía quejar.
Tras un rato de estar conmigo preparamos la cena y cenamos juntas, y ya que podía se quedó a dormir. Fue un día bastante interesante, había hecho amigas y un grupo, y el chico más guapo y misterioso de la clase se había fijado en mi y me había ayudado, la suerte me sonreía, esperaba que siguiera así el resto del curso, pero....

Pronto tendríamos aquella excursión tan esperada al monte Connard, lo malo era que Grün estaba molestando todo el rato, se hacía muy pesado, aunque por suerte nunca llamó a mi casa.

Las chicas y yo quedamos el día de la excursión ya para preparar las maletas, aunque aun yo no había ido, estaba por bajar de mi piso ya vestida y con mi maleta para ir a la casa de Vianna, de allí ya iríamos al instituto, donde nos recogería un bus que nos llevaría al monte.
Cámara en mano, bikinis, ropa y demás era lo que llevaba, junto a un montón de dinero, claro, pasaríamos varios días allí, aunque con todas las demás clases de fotografía del instituto Chaos.

Al bajar sola caminé en dirección a la casa de mi amiga equidna, no se encontraba muy lejos, pero desdichada de mi me pude encontrar en mi camino a Grün con su maleta, que al verme sonrió.

-Hombre, si es Celine la ratita.-Me dijo con tono burlesco.

-Buenos días a ti también Grün.-Respondí de mala gana, sin detener mi paso, a lo que él me siguió.

-Veo que has decidido ir de todas maneras a la excursión...

-Si, ¿algún problema?

-En absoluto, aunque creo que tienes demasiado potencial para estar en un grupo de lerdas y mojigatas en el que estás.

-Me caen bien y son buenas trabajadoras, disfruto de su compañía y solo quiero divertirme, no me importa el premio.

-Pero a ellas sí, más de lo que te imaginas, yo llevo ganando muchos meses y están ardidas conmigo, a mi no me importan los premios, solo es casualidad, y ellas incluso han intentado sabotearme.

-¿Por qué debo creerte?-Me detuve en mitad de la calle, mirándole un poco enfadada.-Escúchame, no soy una persona violenta, pero me tienes harta, quiero que dejes de decir cosas malas sobre mis amigas o tendré que tomar medidas.

-Bueeno, pasará el tiempo y te darás cuenta, aunque... Harías mejor equipo con el mio, ¿no crees?

-Desde luego que no, somos incompatibles, tú eres muy competitivo según me dijeron, y a mi me la suda todo eso, tan solo quiero ser reportera.

-Vale Celine, tú ganas por ahora.

Yo me quedé sin decirle nada más y continué mi camino, ya quedaba menos, pero ese conejo pesado me seguía aun, y me estaba poniendo de los putos nervios.

-¿Se puede saber por qué me sigues?-Le pregunté de nuevo, nerviosa.

-Puede que no seas de mi grupo, pero quiero ser tu amigo, no hemos empezado con muy buen pie.

-Haz memoria genio, llamaste a casa de Tiara solo para meterle nervios en cuanto a lo del concurso y me llamaste inútil.

-No me imaginaba que ibas a estar tú, ni siquiera te conocía, tú contestaste al telefonillo, y el problema lo tengo con esas tres, no contigo, te dije eso por el momento tan tenso que tenía.

-Uf... Grün, comprende que yo me enfade si intentas atacar a mis amigas, vale que las conocí ese mismo día, pero son las únicas que tengo en el instituto.

-¿Y qué hay de Shane? Tengo entendido que él y tú hacéis pareja en clase de fotografía.

Sentí un escalofrío que recorrió desde mi cola hasta la nuca atravesando toda mi espalda, ese chico que tanto me gustó... ¿Le conocía Grün?

-¿Cómo sabes tú eso?-Pregunté nerviosa.

-Veo que aun no conoces mucho sobre la gente de nuestro instituto, al menos deberías conocer la fauna que reina sobre el curso de la fotografía y el reportaje.

-Vamos a llegar tarde, prefiero que me lo cuentes otro día.

-Estoy dispuesto a hablar contigo amistosamente, ya que contigo no tuve problemas... Aun... Y te propongo que en la excursión hablemos a escondidas aunque sea, a tus amigas no les haría gracia que te juntases conmigo, pero yo necesito tu ayuda, me vienes genial.

-Oye... No pienso traicionar a mi grupo, no voy a trabajar contigo.

-Tranquila, ya te explicaré de que se trata, no es malo, y no será preciso atacar a nadie.

Tras eso último, Grün se marchó hacia el instituto solo y yo cambié de camino para encontrarme con Sther, Vianna y Tiara en la casa de la segunda.
Me dejó ese chico extrañada y con curiosidad, aunque me seguía pareciendo algo estúpido, solo deseaba conocer lo que pasaba a mi alrededor y poder integrarme, y en eso él si me podía ayudar.
Eso sí, la mala espina que me dio no se la quita nadie.

Una vez reunida con mis compañeras nos encaminamos hacia el instituto con las maletas, y allí había dos buses donde nos montaríamos los cuatro grupos de fotografía, dos en cada uno. El A y el B irían en el primero y el C y el D en el segundo, Tiara, Vianna y yo éramos del C y Sther del D, pero no sabía que Grün también, eso nos jodería mucho el viaje.

Colocamos las maletas en el maletero del autobís y cogí mi bolso para llevarlo en la mano con algunas cosas necesarias. Y en un principio iba a sentarme con Tiara, y para mi mala suerte Grün me quitó el sitio y se sentó con ella. No se por que, fue bastante random, pero no me apetecía discutir con semejante pesado, así que busqué otro sitio libre para socializarme con algún otro compañero.
Entró al bus Shane, y al verme buscando sitio me puso una mano en el hombro, yo estaba de espaldas y no lo vi, me dio un escalofrío y me giré mirando.

-Hola Celine, ¿nos sentamos juntos?-Me preguntó directamente.-Me gusta sentarme al fondo.

-Oh... Hola.-Respondí colocando mi pelo.-Claro, vamos, cierto idiota me quitó el sitio con mi amiga y Vianna y Sther se sentaron juntas.

-No te preocupes, el viaje solo dura media hora.

Yo asentí y los dos nos fuimos al fondo a sentarnos. Delante nuestro estaban Tiara y Grün discutían acaloradamente, Vianna y Sther se situaban justo a nuestro lado y nos hablaron.

-Sentimos mucho haberte dejado sola, Celine.-Me dijo Vianna tímidamente y con arrepentimiento.

-No te preocupes, ha sido culpa de Grün, nosotras ya teníamos las parejas hechas.-Contesté.

El conejo nombrado se asomó por el sillón delantero y me miró frunciendo el ceño.

-Calla Celine, eres una lerda.-Me dijo gratuitamente.

-Pero que...-Dije, aunque no me dio tiempo a acabar la frase, porque Shane me interrumpió y miró mal a Grün.

-Eres un gilipollas, ¿lo sabías?-Le dijó él al conejo, totalmente relajado, incluso riendo un poco.-Ten un poco de consideración con Celine, es nueva y lo que quiere es integrarse.

-Si se ha integrado, le he visto las tetas y tú no.

Recordé ese instante y me ruborizé mirando hacia la ventana. Shane se sorprendió mucho y me miró un poco mal.

-¿En serio?-Me interrogó ciertamente extrañado.

-¡Eso no fue culpa suya!-Exclamó Tiara.-Fue Sther, que iba pedo y le quitó el bikini delante de él.

-Prefiero no preguntar en qué situación os encontrábais...

-Fue muy gracioso...-Comentó la hámster riendo un poco, mientras se recostaba en su asiento cerrando los ojos.

-Para mi no...-Repliqué, un poco molesta.

-Ah, ¿puedo preguntar por qué te has sentado conmigo?-Cuestionó Tiara a Grün, un tanto perdida ante la situación.

-Por esto...

Él se acercó a la koala y la besó en los labios con intensidad delante de todo el mundo.

Continuará!

martes, 30 de junio de 2015

Capitulo 3: ¡Senos fuera!

Fuimos a comer al McFurry's, allí todo estaba delicioso. Además mis nuevas amigas y yo habíamos congeniado muy bien, resulta que a final de trimestre iba a haber una excursión a un monte y ellas me invitaron a ir, pues íbamos a ir varias clases y ellas iban juntas. Yo acepté, me encantaba ir de excursión.
Tras la comida decidimos hacer deberes en la casa de Tiara, vivía en un chalet con sus padres y su hermano pequeño, pero los tres habían salido a comprar y estaríamos solas toda la tarde.
Al fin llegamos a la gran casa de mi amiga koala y allí había un montón de cosas, había piscina, jacuzzi, una pista de paddle, y un sótano enorme con muchos juegos y un bar chiquitito, todo era fantástico y una cosa llegó a la otra y... Acabamos bebiendo cervezas en el sótano, después nos fuimos al jacuzzi con los bikinis (si, nos los llevamos por que no sabíamos que haríamos). Allí nos contamos nuestra vidas e hicimos un pequeño concuro de ver a cual le quedaba mejor el bikini, acabo ganando Vianna, la verdad es que ella era bastante mona y bonita, tras sus gafas se escondía una equidna muy hermosa.

De pronto llamaron al telefonillo, Tiara tenía uno que tenía varios teléfonos por toda la casa para que se oyera en todos, uno estaba en el patio, donde estábamos con el jacuzzi, entonces, aprovechando que yo estaba cerca y aguantaba bien el frío, fui hacia el teléfono y pregunté. 

-¿Quién es?

-¡No se quien eres, pero dile a Tiara que salga ahora!-Alguien de voz muy irritable vociferaba por el telefonillo como un loco.

-Eh, cuidado con tu tono, yo tampoco se quien eres pero ya me hago una idea: un gilipollas.

Las otras tres estaban escuchando la conversación mientras salían de la tina y se secaban con toallas.

-¡Bien dicho Celine! ¡Tú lo vales!-Dijo Sther completamente borracha, se había tomado unas cervezas más que nosotras.

-Dile a Tiara que se ponga, ¡pedazo de lerda!-Volvió a decirme aquel tío.

-Está bien, bobo.

Le pasé el cacharro a Tiara y habló con el que estaba diciendo polladas al telefonillo.
Resignada,  ella fue a abrir la puerta de la calle, así que salimos las cuatro juntas y Tiara abrió. 
Se pudo ver a un conejo rojo y verde con una cara de mal humor increíble, iba vestido con una camisa blanca de botones y unos pantalones vaqueros, llevaba una cámara en su funda, pude deducir que se trataba de otro estudiante,  pero no de nuestra clase.

-¿Qué quieres Grün?-Preguntó desganada la koala.

El conejo, con aires de superioridad y ningún permiso entró en la casa de Tiara mirándonos a todas desafiante. 

-¿Tenías fiesta?-Preguntó retóricamente, ya que parecía no esperar ninguna respuesta.-Bueno, venía a avisarte que durante la excursión al monte Connard va a haber un concurso de montaje de imágenes, y quien gane conseguirá una beca para el curso especial donde enseña periodismo el famoso Kanú Dingo, y que no pienso perder ante esto.

Tiara se quedó algo petrificada al igual que las demás, yo no entendía de aquello, nada en absoluto, pero por la cara de mis amigas suponía que era algo importante.
En uno de los momentos, aquel conejo raro, aparentemente llamado Grün, se me quedó mirando, al parecer era yo la única que no estaba tapada con una toalla y estaba en bikini.

-Tú debes de ser la que me ha llamado gilipollas por el telefonillo...-Me dijo mientras me rodeaba con el brazo.-Eres nueva, y creo que serás una manta, te has ido a juntar con el peor equipo fotográfico de tu clase, aunque creo que no había mucho para elegir en esa estúpida aula. 

-¿Nos estás llamando inútiles?-Gruñó Vianna, indignada.-Eres odioso Grün...

Yo me aparté de ese tío y le miré  mal.

-¿Solo has venido a molestarnos con eso? Podrías meterte en tus asuntos y dejarte de tonterías, sea quien sea el ganador, el perdedor debería ser buen perdedor y el ganador buen ganador, digo que no hay que echarse en cara nada, y mucho menos venir a la casa de una compañera a restregarle nada,  ¡se supone que somos adultos!
(Nota: en Mobius la mayoría de edad está a los 16 años por que la gente crece más rápido que los humanos).

Tras decir eso, el conejo se me quedó mirando algo molesto, y me iba a decir más cosas, si no fuera por Sther, que estaba tardando mucho en hacer de las suyas, y desde atrás me desató la parte de arriba del bikini, haciendo que mis pechos salieran y rebotaran frente a Grün.

-¡Sther!-Grité tapando mis senos con mis brazos, era obvio que Grün se quedara paralizado y rojo, solo retrocedió hasta la puerta y miró a Tiara.

-¡Estás avisada de que voy a ganarte!-Después de soltar eso, el extraño chico ese se fue corriendo con la nariz sangrante.

Pasé mucha vergüenza, pero me coloqué el bikini y Tiara cerró la puerta.

-¿Quién era ese petardo?-Pregunté molesta.

-Es Grün Lighter the rabbit, es un tío ultra competitivo, y siempre lo gana todo, estoy muy harta de él.-Me contestó Tiara, frustrada.

-Cierto, y nos llama inútiles y perdedoras siempre...-Añadió Vianna, que no quería haberle dicho nada antes.

-Ese gilipollas lo que necesita es un buen polvo.-Gritó Sther con una botella de cerveza en la mano que antes no tenía.-¡Que los conejos están todos salidos!

-No seas tan obscena, ¡y deja de beber, esas cervezas son de mi padre!-Irrumpió Tiara quitándole la botella.

Yo suspiré y miré a todas.

-Creo que debería volver a casa, tengo que arreglar mi ordenador e instalar los programas que tenemos en clase.

-Yo puedo ayudarte Celine.-Me dijo Vianna.-Soy buena informática. 

Yo acepté su ayuda y entonces nos vestimos y colocamos las cosas, y mientras Tiara y Sther seguían allí, Vianna y yo fuimos a mi piso para arreglar y actualizar mi ordenador.

Sólo esta aventura extraña estaba empezando, no sabíamos como irían las cosas... Y menos con ese nuevo idiota incordiando.

Continuará!

lunes, 29 de diciembre de 2014

Capítulo 2: Muy fan de los chaos

Ese chico tenía algo especial, no me podía resistir... Tampoco podía confesar a mis recientes amigas que me gustaba, porque yo podía estar equivocada en cuanto a ese chico. Me daba cosa preguntarle y... Que drama todo, ¿verdad?

Acabó el recreo, solo nos quedaban dos horas de clase y no pude quitarme a aquel chico de la cabeza en todo el rato, y la última clase era de ponernos en pareja (no en nuestros grupos habituales) y fotografiar cosas por el patio, nos iban enseñando los detalles de cada cosa y todo era muy interesante de aprender. Por suerte me había traído la cámara.
Pensaba ponerme de pareja con mi compañera Tiara, pero al profesor le pareció gracioso ponerme con otra rata, y fue cosa del destino que me emparejara con Shane. Cuando el profesor hizo las parejas, Shane me miró con un poco de desgana, pero me sonrió y me dijo hola.

Cuando salimos de la clase para ir al patio, todos nos desperdigamos por todos lados, nos habían indicado hacer unas fotos buenas de las flores del jardín, o de algún animal si lo encontrábamos. Mi compañero nuevo me llevó a una zona bastante apartada que estaba en la parte trasera del instituto. Allí había un pequeño lago donde habían unos pequeños chaos, estos siempre estaban por ahí, según me habían contado.

Ya estando por ese sitio, Shane me volvió a mirar, no había dicho nada durante todo el camino, y algo me decía que en ese momento iría a hacerlo, yo tampoco dije nada, estaba algo avergonzada.

-Entonces...-Dijo mirándome seriamente.-¿Tú eres Celine?

-Si, soy yo... Disculpa si entorpezco tu trabajo...-Le dije agachando la cabeza algo avergonzada.-No se cómo va esto...

-No tienes por que pedir perdón, te ayudaré, por eso te he traído aquí.

No entendí mucho, pero me alegré de que él fuera amable. Levanté la cabeza y le miré sonriendo, era realmente guapo de cerca.

-¿Vamos a fotografiar a esos chaos?-Pregunté señalándolos, estaban algo lejos.

-Sí, pero supongo que te habrás fijado en que nadie ha venido a este lugar, y eso que es el más bonito del lugar y es perfecto para hacer fotos.

-Ah, es cierto, ¿por qué ocurre esto?

-Esos chaos son muy agresivos, nadie sabe por que, y si alguien se acerca lo atacarán, sea quien sea.

-¿Y por qué me has traído aquí?-Pregunté asustada, seguro que quería que esos bichos me comieran, tenía miedo...-¿Quieres que me hagan daño?

Shane negó con sus manos poniendo una cara rara para mostrar su inocencia.

-Claro que no.-Repuso sonriendo.-Yo solo hago daño a quien me hace algo malo a mi, por el momento tú me estás cayendo bien.

Yo sonreí de nuevo ante eso, era muy encantador.

-¿Entonces?

-Precisamente a mi me tienen miedo, y no me atacarán ni a nadie que esté junto a mi, incluso desde esta distancia podían habernos hecho algo, pero se mantienen mansos y se dejan fotografiar por mi, y como eres la nueva te ayudaré a subir nota con este truco mio, nadie ha conseguido hacerles fotos a estos chaos y yo guardaba esto para el final del primer trimestre.

Yo asentí, aquello era increíble, me sentía muy privilegiada, y cada vez Shane me gustaba más.

Tras eso hicimos fotos, a mi los chaos me hacían burla y en algunas fotos salían raros o enseñándome el culo. Hasta que Shane les miró malamente y se estuvieron quietos.
Finalmente obtuvimos las fotos deseadas y nos marchamos a clase.
El profesor nos felicitó por el trabajo y nos puso una nota bastante alta, todos allí estaban sorprendidos, y Tiara y Vianna nos miraron riendo disimuladamente, yo suspiré y no dije nada más.
La clase acabó, sonó el timbre de salida y yo recogí mis cosas. Tiara tenía en mente invitarme a comer con ella y sus dos amigas, yo también fui con ellas, por suerte llevaba 20 rings para comer algo.

Caminamos por las calles de la ciudad y Vianna se aproximó a mi para interrogarme, Sther no se había enterado aun de nada.

-¿Cómo es ese Shane?-Me preguntó extrañada.-Ninguno de la clase ha hablado con él seriamente.

-Es bastante simpático, me ha ayudado con la nota, y eso que pensaba que suspendería por llegar tarde.-Respondí mirando a Vianna.

-Nosotras nos lo imaginábamos más huraño y estúpido.-Contestó Tiara.-¿Creéis que haría bien en nuestro equipo?

Vianna miró a Tiara encogiéndose de hombros.

-Tendríamos que conocerle un poco más, que Celine se encargue de eso, y ya después si vemos que es de fiar le metemos en el grupo.

Ambas me miraron, esperando una respuesta.

-Vale, pasaré tiempo con él, si acaso vuelven a ponernos juntos...-Respondí algo ruborizada.

Sther nos miró sin entender nada y al final se lo explicamos todo y nos fuimos a comer.


Continuará!

viernes, 5 de diciembre de 2014

Capítulo 1: Una melena de ensueño.

El día antes de entrar por primera vez al instituto estaba en mi nuevo piso colocando las cosas de la mudanza. La casa no era muy grande, era un edificio de cuatro plantas y yo estaba en la segunda, en el piso 2ªB. No vivía con nadie, estaba sola, pero tenía dinero ya que mis padres me enviaban lo suficiente para pagar el alquiler y mis cosas para vivir, al menos hasta que consiguiera un trabajo.
Estaba nerviosa, ¿qué tipo de gente habría en ese instituto? ¿Haría amigos o me odiaría la gente? Todo era un misterio y no paraba de comerme la cabeza. Por la noche casi no pude ni dormir.

Me levanté al día siguiente a las ocho de la mañana, ya que entraba a las nueve y preparé mi mochila con mi único libro de clases y un cuaderno, también un estuche con bolígrafos, lápices y una goma. Me vestí con mi camisa negra y mis calzonas marrones, me lavé la cara, me peiné y me puse las botas. Rápidamente me puse un vaso de leche y lo bebí porque llegaba tarde.
Salí corriendo de casa y fui al instituto andando, me quedaba bastante cerca.

Al llegar justo tocó el timbre y entré a mi clase, todos los demás también estaban entrando, no conocía a nadie, y seguro que en el recreo estaría sola.
Me senté en una mesa de la segunda fila, al lado de la pared, junto a mi se sentó una chica que parecía ser un koala de pelo verde, me saludó y fue amable conmigo. Hablamos un rato y supe que se llamaba Tiara, era bastante amigable y me cayó bien.

Como yo era nueva en mitad del curso me presentaron y me morí de vergüenza, y menos mal que no me hicieron levantarme del asiento. Me explicaron que debía comprar una cámara para hacer fotos y vídeos para reportajes y formar un equipo de reporteros con otros alumnos, pero me daban tiempo ya que aun debía conocer a mis compañeros.

Aun quedaba mucho curso, solo había pasado un mes de clase y quedaba mucho, tenía mucho que aprender allí.

La primera clase fue sobre configurar cámaras y hacer montajes de vídeos, o bien en fotos, pero eso se daba en las clases de retoques fotográficos, aprenderíamos a usar el Photomaker (photoshop en ese planeta (??)).

La segunda clase era una charla sobre como realizar un buen reportaje sobre lugares o sitios, y también sobre cómo tratar con otra gente al hacerle una entrevista y evitar que se sintiera incómoda.
Después llegó en recreo, solo hay cuatro horas de clases sin contar la media del descanso, y fue un alivio porque antes debía hacer seis horas en clase.
Ya en el recreo unas chicas se pusieron a hablar conmigo, una equidna de pelaje amarillo y ojos color chocolate llamada Vianna, y una hamster amiga suya, esta era de otra clase y tenia el pelo corto y gris con motas rosadas llamada Sther. También estaba la koala Tiara que decidió meterme en su equipo de reportajes con las otras dos chicas. Yo acepté su oferta, pues me hice su amiga y nos llevamos bien.
Durante el descanso ellas me hablaron sobre los chicos de la clase, y me dijeron que realmente solo unos cinco merecían la pena, Sther tenía más suerte porque en su clase todos los chicos eran encantadores.

Estábamos sentadas las cuatro en un banco del parque del instituto.

-No te hemos hablado de Shane.-Me dijo Vianna sonriéndome y señalándome a un chico que estaba bajo la sombra de un árbol.-Es de nuestra clase también y es muy misterioso, no se ha metido en ningún grupo y siempre está callado, parece emo o gótico.

Miré a aquel chico, no estaba muy lejos y pude ver algo de su cara... Joder, era como si hubiese visto a un ángel del infierno... Tenía el pelo largo y negro, pero su cuerpo era violeta oscuro y... ¡Era una rata como yo!

Oh hermoso y cruel destino... Fue un flechazo que atravesó mi corazón, pero sabía que debía callarme, al menos hasta tener más confianza con las otras chicas para poder contárselo.
Yo me había quedado embobada con el supuesto Shane, parecía tener el mismo estilo que yo. Su camiseta negra con dibujos de sangre lo decía todo, y sus pantalones vaqueros rotos me parecieron muy atractivos... Estaba pensando en hablarle, pero no sabía si se molestaría conmigo.

-¿Celine?-Me decía Tiara intentando captar mi atención.-¿Estás bien?

-¡Oh si!-Respondí reaccionando y mirando a todas las chicas.-Me estaba imaginando cómo sería su vida...

-Supongo que aburrida, en clase solo se toca el ciruelo y no hace nada.-Volvió a comentar Vianna.

-A mi me parece mono.-Contestó Sther, algo que me incomodó, no quería que se llevara a mi futuro amado.-Aunque no es mi tipo, demasiado ''dark'' para mi gusto.

Lo último que dijo me alivió, yo tendría alguna oportunidad, pero me daba vergüenza hablar con él.

¿Seré capaz de hacerlo?

Continuará!